miércoles, julio 11, 2007

prófugos

Mis manos tienen ese olor a vainilla que trae recuerdos. Me esfuerzo en seguirle el ritmo a tu respiración. Mis dedos juegan por el borde de tu cuello, hago pausas, en este silencio todo puede ser perfecto.

2 comentarios:

Pablo dijo...

yo creo que esa pausa en medio del silencio puede terminar por ser un peligro mortal. Igual es cuestion de vivirlo. Suerte

emilyblue dijo...

http://ilusionopticadelpensamiento.blogspot.com/

mira...